Antiguamente íbamos a las panaderías con la bolsa de tela a recoger el pan, a las lecherías con nuestra propia botella a rellenar la leche recién ordeñada, ahora todo se ha ido industrializando los alimentos han perdido su sabor, las cadenas se han ido alargando y ya no existe un contacto directo con el productor.
¿Cómo afecta esto a la industría de la cosmética?
La industría de la cosmética en la UE tiene una regularización muy estricta, donde para producir bajo los estándares, hay que seguir una serie de normas. Presentación de documentación, pasar una serie de tests y certificaciones en laboratorio que son muy costosas, de manera que para el pequeño productor se hace muy difícil cumplirlo todo, ya que se requiere una gran inversión.
Además de la consecuente fecha de caducidad que tienen los cosméticos, que tras producir en grandes cantidades si estas no se venden en el tiempo requerido hay que desecharlo.
Aprender a crear nosotros los productos
La alternativa frente a las grandes restricciones que impone la industria de la cosmética es ser más autónomo. Educarnos en los ingredientes naturales y aprender a producir nosotros en unidades pequeñas nuestros productos de autocuidado.
Notas de Mar organiza talleres cada fin de semana sobre los temas que en las consultorías van surgiendo para que conozcas formas naturales de cuidarte sin depender de ningún producto del mercado.
Los aceites que usamos en Notas de Mar son todos certificados ecológicos y de proximidad, porque nos importa el contenido y porque sabemos que al final el ingrediente es el producto!
Por eso apoyamos a los pequeños productores locales, el comercio de proximidad, Km 0.
Ven y rellénate el frasco!